La vida de los animales que viven en la calle es realmente dura. Ante esta situación, obtuvieron un cachorro devastado que se negó a irse con el cuerpo de su madre. Esta peludita esperaba que su madre se levantara, pero la realidad es que nunca más lo volvería a hacer, porque estaba al borde de la carretera y sin señales de vida.
Ninguna mascota merece pasar por este tipo de situaciones desesperadas. En la calle no sólo hay gente peligrosa o cruel. La dinámica se centra en el propósito de sobrevivir con los alimentos que se descubren, además de buscar un santuario donde se les permita permanecer.
Las vías públicas también son una amenaza para los cachorros más expuestos. Aunque no tenemos una idea de cuántas mascotas son atropelladas cada día, no hay duda de que se trata de un hecho común. Tal fue la situación de la madre de este cachorro que quedó devastada y sola.
Muchos cachorros se han quedado sin madre, sin padre o sin hermanos tras ser atropellados por un vehículo. En varias ocasiones hemos visto imágenes en las que un perro intenta recuperar el cuerpo de otro perro peludo en medio de la carretera.
Aunque es algo que hemos visto muchas veces, no deja de ser una escena terrible. Esta realidad genera un gran dolor, tanto como el que sintió la cachorrita devastada por el sufrimiento de su madre tras un atropello y fuga.
Como pudo, se arrastró con su pantorrilla hasta el borde de las vías, y poco tiempo después habría perecido. Mientras tanto, su pequeña hija esperaba a su lado esperando que despertara, porque no podía comprender lo que estaba pasando.
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Lamentablemente, en ese momento su futuro parecía inestable, ya que lo habían abandonado a su suerte. Sin embargo, un individuo no pudo evitar ser conmovido y detenido para intentar ayudar. Rápidamente, convocó a una organización que acudió al lugar para dar respuesta al tema de la perra atropellada y su cría, el cachorro destrozado.
La organización fue la encargada de darle un digno entierro a la víctima de la tragedia. A su vez, las acciones del cachorro sólo demostraron una cosa: quería recuperar a su madre. Ella se negaba a alimentarse con la leche de fórmula que le proporcionaban, porque estaba desolada y no mostraba valentía para hacer nada.
Desde el albergue le brindaron todo el tiempo y cuidados que necesitaba aunque él lo rechazó prácticamente todo. Se trataba de darle un espacio para reparar su corazón, aunque los encargados de cuidarla comenzaron a dudar de si podría superar el duelo.
Así, actuaron de manera disciplinada para que se recuperara. Por vía intravenosa la hidrataron y le dieron los nutrientes que necesitaba. El objetivo de los veterinarios y rescatistas era mantenerla con vida e instarla a seguir adelante. Si bien la cachorra quedó devastada por la muerte de su madre, poco a poco comenzó a recuperarse. Los médicos y voluntarios que la cuidan eligen honrar sus horas de duelo.
Una vez que supere la angustia causada por la muerte de su madre, la organización dará un paso adelante para encontrarle una familia adecuada. Todos los perros necesitan vivir en un hogar donde se respeten sus derechos y se asegure su bienestar.